Ajuste y Pasividad en Implantoprótesis. ¿existe repercusión clínica?

Dra. Ana Orozco

Doctora en Odontología, Profesora Asociada de Prótesis Estomatológica y Profesora y miembro de la Comisión Académica del título de Especialización en Prótesis sobre Implantes en la Universidad de Sevilla.

En la actualidad, la implantoprótesis ya es un tratamiento de rutina en las clínicas dentales y su éxito a largo plazo tiene un carácter multifactorial. Es nuestro objetivo prevenir las complicaciones tanto biológicas como mecánicas. Respecto a éstas últimas, será crucial para su prevención el control de las tensiones estáticas y dinámicas que recaen sobre el sistema implantoprotésico.  Las tensiones estáticas vendrán dadas por el ajuste o pasividad de la prótesis y la precarga de los tornillos. Cuando las estructuras atornilladas no presentan un asentamiento pasivo, habrá una tensión estática mantenida que si bien no parece conllevar problemas biológicos, sí que tiene relación con complicaciones mecánicas relacionadas con los tornillos.  Sin un asentamiento pasivo, no podremos dar la precarga correcta a los tornillos y el conjunto prótesis-implante ya que no se comportará como un conjunto rígido, y cualquier impacto externo producirá directamente un aumento de tensión en el tornillo que no ofrecerá protección contra la fatiga tendiendo a aflojamientos y fracturas.

Para la consecución de un correcto ajuste de las estructuras debemos ser meticulosos en cada paso de la confección de la prótesis sobre implantes, evitando posibles distorsiones que den lugar a desajustes finales.

La toma de impresiones será el primer punto clave para la obtención de la pasividad. A ello se sumará una adecuada técnica de laboratorio para la confección de las estructuras. Actualmente, los estudios comparativos sitúan a las técnicas CAD-CAM de mecanizado por sustracción (fresado) a la cabeza en la obtención de estructuras con mejor ajuste y menos tensiones al ser atornilladas.  (Fig 1. Ejemplo de estructura fresada Bio-CAM® Ticare)

El asentamiento pasivo de las estructuras y la precarga adecuada de los tornillos, minimizarán los micromovimientos en la conexión corona-implante, protegiendo al sistema de la fatiga y previniendo complicaciones mecánicas relacionadas con los tornillos (aflojamientos y fracturas).

De todo esto, hablaremos en profundidad durante Ticare Evidence, XI Congreso de Actualización en Implantología, en la ponencia que impartiré en el Programa de Protésicos sobre «Ajuste y Pasividad en Implantoprótesis. ¿existe repercusión clínica?»

Fig.1.
Configurar cookies